Bolivia registrará un importante crecimiento en 2011, con una tasa del 4,5 % del producto interno bruto (PIB), pero deberá contener las presiones inflacionarias, que se prevé alcancen el 10,4 %, según un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI). Según cifras oficiales, la economía boliviana creció en un 4,1 % en 2010.
"Se espera que la economía boliviana agarre más impulso gracias la continuada recuperación de la producción de hidrocarburos, el aumento de la inversión pública y los favorables precios de las exportaciones", indicó el FMI en su reporte.
No obstante, advirtió que la prioridad a corto plazo es "contener la inflación", por lo que recomendó a las autoridades bolivianas "una retirada más rápida de los estímulos monetarios".
Asimismo, señaló que "una moderada apreciación del boliviano (la divisa local) ayudaría a reducir las presiones inflacionarias".
El organismo internacional valoró, además, las "prudentes políticas macroeconómicas" del Gobierno de Evo Morales.
"El superávit de las finanzas públicas y la cifra récord de las reservas internacionales ofrecen fuerte protección contra posibles shocks externos", agregó.
Como retos para el futuro, el reporte del FMI subrayó "la necesidad de mejorar el clima de inversiones en Bolivia, especialmente a través de las reformas del marco legal que aseguren reglas claras y estables para el sector privado".
Por último, hizo un llamado para "mejorar los programas de transferencias, que faciliten la reducción de los subsidios a los combustibles y liberalización de los precios de los productos agrícolas".
fuente:el deber